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Con la caída del consumo de refrescos, las grandes multinacionales están innovando con el lanzamiento de nuevas aguas de sabores;sin embargo, estas contienen hasta 8 gr de azúcar por cada 100ml. Desde TAPP Water desmitificamos algunas creencias sobre el agua de sabores y damos recetas para hacer un agua infusionada casera y saludable.
Los expertos en salud recomiendan consumir un mínimo de entre 1,5 y 2 litros de agua diarios. No obstante, hay muchas personas a las que se les hace difícil tomar agua sola o prefieren ese toque de sabor que ofrecen los refrescos. Por su elevado contenido en azúcar y aditivos, existe una preocupación creciente en torno a sus efectos para la salud. Por ello, las aguas con sabor de las grandes empresas multinacionales parecían haber llegado para desbancar a los refrescos y convencer a aquellas personas menos avezadas a beber agua sola. Sin embargo, este tipo de aguas contienen también cantidades muy elevadas de azúcar y aditivos, siendo menos saludables de lo que prometen. Desde TAPP Water, queremos incentivar el consumo de aguas infusionadas como una alternativa saludable, sabrosa y económica, que puede prepararse fácilmente desde casa.
A falta de conocer los datos de 2017, el último informe de consumo de alimentos en España señala que el consumo per cápita de bebidas refrescantes en el hogar se situó en 40,21 litros por persona durante 2016, una cantidad 2,2 % menor que lo ingerido en el año anterior, mientras que el agua mineral repunta. Ante esto, cada vez más empresas, especialmente grandes multinacionales, han empezado a comercializar aguas con sabores. Muchas personas que antes bebían refrescos se han pasado a beber este tipo de aguas en busca de ese aporte extra de sabor e hidratación.
El marketing que envuelve a este tipo de producto ha hecho que la sociedad lo acepte como si de una inocente agua con fruta se tratase. Inconscientemente, lo consumimos confiando en que estamos bebiendo un producto saludable. Sin embargo, analizando sus etiquetas vemos que en su elaboración las aguas con sabores utilizan aditivos artificiales que, al consumirse en exceso, pueden llegar a ser perjudiciales, además de elevadas cantidades de azúcar: hasta 8gr por 100 ml. La OMS aconseja no consumir más de 25gr de azúcar al día, mientras que una botella de 1,5 litros de agua con sabores puede llegar a tener 100gr de azúcar, el equivalente a un litro de una bebida de cola normal.
Es por ello que desde hace algún tiempo se viene promoviendo el consumo de aguas infusionadas, muy populares en países anglosajones y del norte de Europa. Por un proceso de infusión en frío, las frutas, especias u hortalizas que se ponen en agua fría, transfieren a esta parte de su aroma y sabor, lo que da como resultado una bebida con las mismas calorías que el agua (ninguna) y su mismo poder hidratante, además de un toque extra de sabor. A diferencia de las aguas comerciales, no contienen edulcorantes artificiales o químicos para conservarse, ya que se preparan con ingredientes naturales. Y, lo mejor de todo, son muy fáciles de preparar en casa o en la oficina.
Se suelen emplear unos dos litros de agua para este tipo de recetas, por lo que el agua empleada será determinante en el resultado final. Utilizando un filtro para el grifo como TAPP 1, se consigue agua ilimitada de mejor sabor directamente desde el grifo, lo que supone una base ideal para este tipo de bebidas, sin necesidad de gastar dinero ni tiempo en cargar con agua embotellada. A esta agua filtrada se le pueden añadir cítricos para conseguir un agua con sabor energizante, o frutas para darle un toque dulce. Además, no es necesario ir a comprar ingredientes específicamente para hacer este tipo de bebidas. Cuando pelemos un mango o una piña, en lugar de tirar la piel y la pulpa, podemos utilizarla para hacer una deliciosa agua de frutas, y así reduciremos al mismo tiempo el desperdicio de alimentos. Lo mismo con la piel del pepino o la zanahoria, así como los tallos del perejil, el cilantro o la menta, que darán aún más sabor si les damos unos golpecitos con la base de un vaso.