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De acuerdo al V Estudio CinfaSalud: “Percepción y hábitos de salud de las familias españolas sobre nutrición infantil”, avalado por la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP), la situación actual de los niños y niñas españoles en lo que respecta a sus hábitos alimentarios es preocupante y supone una llamada de atención sobre la evolución de los mismos.
En este sentido, el experto del Departamento Científico de Cinfa, Eduardo González Zorzano, indica que “dado que una correcta nutrición constituye un pilar básico para el correcto desarrollo y bienestar del niño, los progenitores deben inculcar a sus hijos e hijas hábitos alimentarios saludables que les permitan crecer sanos y les ayuden a prevenir el sobrepeso y la obesidad, así como enfermedades crónicas de base nutricional en la infancia, como la diabetes o la hipertensión”.
La investigación revela que ocho de cada diez niños y niñas españoles (82,8 %) no desayunan correctamente, más de la mitad (51,9 %) consume carne entre cuatro y siete ocasiones a la semana, mucho más de lo aconsejado por los expertos, y solo uno (21,3 %) toma pescado con la frecuencia recomendada –más de tres veces a la semana-. Mientras, únicamente uno de cada diez (12,1 %) come verdura en más de siete ocasiones, y el 30,3 % toma fruta con esta misma frecuencia. En cambio, tres de cada cuatro niños y niñas españoles (74,5 %) comen chucherías alguna vez a la semana, y el consumo de comida rápida también resulta preocupante: según el Estudio CinfaSalud, ocho de cada diez escolares españoles (82%) la toman al menos una vez al mes, a pesar de su escasa calidad nutricional.
El informe establece diez claves para conseguir los niños se alimenten bien: recuperar en casa la dieta mediterránea, asegúrate de que los niños comen cinco veces al día, guiarse por la pirámide alimentaria, evitar los alimentos que engordan pero no alimentan, comer en familia, aparcar en la mesa el móvil y la televisión, llevar a los niños a hacer la compra, preparar los alimentos de maneras diversas y pedirles que cocinen, promover actividades de movimiento, y asegurarse que los más pequeño duermen más de diez horas.