10 mitos sobre la levadura nutricional

La levadura nutricional va ganando presencia poco a poco dentro de las despensas de los españoles, entre otras cosas por su gran valor nutricional y los beneficios que aporta a nuestra salud, sin embargo, sigue siendo un producto desconocido lleno de preguntas ¿Quién puede consumirlo? ¿cómo debe cocinarse o incluirse en nuestra alimentación? ¿es realmente beneficioso para la salud?

Para ello la empresa especializada en la producción de alimentos y platos deshidratados plant based, Nuveg ha analizado los mitos más comunes que rodean a este superalimento destacable por su aporte biodisponible de vitaminas del grupo B y D, y de proteínas y micronutrientes esenciales como el Zinc o Selenio, además de fortalecer el sistema inmunológico y regular el colesterol.

Los 10 mitos sobre la levadura nutricional

1. Este tipo de levadura es solo para veganos

Desde Nuveg aseguran que cualquier persona puede disfrutar de sus beneficios nutricionales, ya que aporta proteínas y micronutrientes esenciales de alta biodisponibilidad, y de su sabor para enriquecer sus platos. No obstante, está muy extendido entre personas que siguen una dieta vegana, pues productores como Nuveg la fortifican con vitamina B12.

2. La levadura nutricional tiene sabor amargo

A diferencia de la levadura de cerveza, que sí tiene un sabor amargo, la levadura nutricional tiene un sabor suave y ligeramente salado que recuerda al queso. De hecho, está indicada para personas que requieren de una dieta baja en sodio como sustitutivo de la sal.

 3. Es un producto ultra procesado

Esto es completamente falso. Es un producto de un único ingrediente: el hongo Saccharomyces cerevisiae.  

El único proceso que se lleva a cabo en la misma es el de fermentación y secado a baja temperatura (por debajo de 50ºC), y se le aplica alta temperatura durante unos pocos segundos (que no altera su perfil de macro y micronutrientes), lo que la convierte en una levadura inactiva, lo que quiere decir que  no interviene en el crecimiento de las distintas variedades que forman nuestra microbiota intestinal, evitando de esta manera que pudiera afectar negativamente en aquellos casos en los que el usuario sufra de desequilibrios en la microbiota (disbiosis intestinal).

4. La levadura nutricional es un queso

 Si bien la levadura nutricional es óptima para hacer quesos veganos, no es en sí misma un queso vegano ni un lácteo. Sin embargo, su extraordinario sabor puede recordar a este producto, especialmente al parmesano.

5. Es un producto solo para deportistas

La levadura nutricional tiene aproximadamente un 50% de proteína de alta biodisponibilidad, lo que indica que garantiza una buena absorción por parte del organismo, y además es rica en vitaminas del grupo B y micronutrientes, como el selenio y el zinc en su formato orgánico.

Si bien sus características la hacen idóneas para deportistas, pues es energizante, baja en grasas y se digiere con rapidez; también es óptimo para muchos otros colectivos como personas ancianas, o personas con altas exigencias de rendimiento físico o intelectual.

6. La proteína animal es mejor que la proteína de la levadura nutricional

Absolutamente no. Por un lado, tiene un 23% de aminoácidos esenciales frente al 21% de media que tiene la proteína Whey(proteína que se extrae del suero de la leche). Además, a diferencia de la carne, no necesita ser cocinada, por lo que no se pierden nutrientes.

Nuveg destaca que la proteína de la levadura tiene el índice máximo de digestibilidad o PDCAAS (protein digestibility corrected amino acid score), que es el parámetro que establece la OMS para establecer la digestibilidad.

7. No se puede tomar todos los días

No es posible intoxicarse por un exceso en el consumo. Las vitaminas del grupo B son hidrosolubles, además, al tener selenio y zinc en su versión biodisponible, permite tomar grandes cantidades de forma segura. Por tanto, es un producto óptimo para todos los días.

8. No tiene vitamina b12

Aunque es cierto que en el proceso de fermentación de la levadura nutricional no se genera Vitamina B12, productores como Nuveg añaden la misma en el sustrato del cual se alimenta la levadura durante el proceso de fermentación, por lo que ésta se integra en la estructura celular de la misma, ofreciendo todos sus beneficios.

9. No es apta para celíacos

El proceso de fermentación de la levadura nutricional no supone el contacto con ningún cereal que sea susceptible de contener gluten. El sustrato del cual se nutre es la melaza de remolacha o de caña, y en ningún caso se hace uso de ningún ingrediente que contenga gluten.

10. La levadura nutricional engorda

No tan sólo no engorda, si no que puede llegar a ser un gran aliado para las personas que quieran controlar su peso. Y esto es debido a que está compuesta por una combinación excepcional rica en proteína completa y fibra, que por un lado ofrece un efecto saciante, y por otra parte mantiene aporte energético de absorción lenta (bajo índice glucémico), lo que previene la acumulación de grasas.